«la muerte. E el mal de sus manos: tienen por bien. El que es bueno d·ellos: es como Palinuro. E el que es justo: como la spina de·la sierpe: e pared de çarça: los quales no quieren saber: e entender muchas cosas: para bien obrar: ni abrir los ojos: para ver claramente: tanto les ha cegado su malicia. O loca malicia: e mala locura»