«que ninguna cosa tuuo en si sinistra: mas todo quanto en el se pudo hallar fue diestro. E por·ende hablando el bienauenturado Jeronimo de·la crucifixion de sus manos diuinas y sacratissimas: no las distingueçe por diestra y sinistra: mas por primera y segunda. E dize que con·el entendimiento de·la mano primera en·la cruz, apresiono nuestra muerte: y con·el de·la segunda hallo la vida que»