«espejo de·la virtud: esta abierto el camino de·la saluacion: la puerta de perdon se nos offrece: y la malicia de·los hombres no se auerguença de desuiar se. Perdona pues, o hombre, haue misericordia y remite: ca assi conuiene a·la propia salud: la qual obro tu dios y señor en·la cruz: dexando te por exemplo de piadad aquella palabra tan dulce y diuina: perdona les padre, ca»