«repartiessen tus vestidos reuerendissimos, y sobre la tunica porque era sin costura alguna, echassen suertes porque no se partiesse: otorga me gracia para que nunca mis pensamientos se repartan, saluo en tu continuo seruicio y contemplacion, y que participando de tus enxemplos sanctissimos: y obseruando tus mandamientos: pueda siempre conseruar la caridad muy entera y sin ruga: pues con·el padre y con·el Spiritu sancto etcetera.§ Despues que los ministros»