«obedeçio pues a·la postre el conde don Simon y truxo el cardenal al infante y en publicas cortes presento·le a·los quatro braços de parte del summo pontifice. Fue recebido con grande alegria por todos: y de causa del tan alto presente que les truxo fue mucho mas festejado el reuerendissimo legado del papa. Trabajo mas en esto que ningun otro prelado del reyno y ahun a sus costas ( segun escriuieron algunos ) el reuerendo»