«propio ser, o bien punir la justicia o del todo perdonar la culpa, por esso la mj bondad oluidando vuestros merescimyentos libremente os perdono la fealdad de vuestro jnnorme peccado tornandĀ·os a muy limpia ignorancia, porque ninguna centella deĀ·los vieios males no quede encendida a peor recayda, el alma limpia y como de nueuo a la ignocente hedad criados os torno al mundo, y vestidos los cuerpos de ignocentes almas porque ante la mj»