«requerjda por los honbres se·allan jnfinjtas buenas: y de·los muy pocos leales, se confirma por sta razon mas nuestro dicho: con otras alegaçiones muy finas las quales por sotilidat de·las sentençias: no las pude comprender nj menos quedar en mj memorja. Mas todas quexosas de su martjrio como de·la destemplada fuerça que los honbres nos fazen quedamos con nuestros sentidos quemados. § Respondio la madrina. Fija mja muy amada: yo»