«a quyen les mata, y matan a quyen les salua de muerte. Y asi las mugeres d·esta mesma manera vsan aborreciendo a quyen las ama y amando a quyen las aborrece, porque en la tu arte mal concertadas andan las tus gentes, que no se da pena a quyen la meresçe nj gualardon a quyen sirue, mas vnos de otros se quexan y ninguno se halla contento. El principio de amar es padescer el»