«la piedad de Dios que qual quier maldad et pecado. E assi dize sant Augustin: mas puede Dios perdonar: que el ombre pecar. E puesto que supiesses que eras del numero de·los que han de ser condempnados: avn en ninguna manera devrias desesperar: por que por la desesperacion non se alcança otra cosa alguna: si non que por ella el muy piadoso Dios mucho mas se offende: e los otros sus pecados»