«el serujr sentis no se conoscera hasta que la muerte os descubra como a nosotros la culpa y ceguedat de vuestra ynocencia, y porque para esto todo fiel conseio que en esta parte os diesemos seria como d·enemigos, contrariamente quyero dexar·lo al tiempo que os descubra su gualardon, y a lo que dizis que de nuestro visto proposito nos apartemos, si a vosotros senyores fuera prouecho havnque a nosotros danyara lo hizieramos, mas a»