«guarda de herar, porque su enemigo non se vengue, e no lo faze por su amigo. El neçio es enemigo de sy mesmo, como sera amigo de otro? Guardat·vos de aquel que ha aboreçido vuestro coraçon. No ayays plazer de amistad de enemigo, que asy es como el agua, que se escalienta al fuego, e quando la lieuan refria·se. No te fies en amor de enemigo, por eso»