«muy pocos pueden ser enfrenados: y es la razon: porque ni este muesso ni otro no lo enfrena: que la dureza le viene de alto de·las barillas y del pezcueço y mucho mas fuerte touiendo le corto: de tal manera que ningun remedio que en la boca se le fiziesse no es prouechoso: pues que el vicio dende no procede mas de lo dicho. De tales cauallos es la discrecion apartar se mucho»