«que non me tocasse ni me mirasse con·los ojos ni entendiesse con su entendimiento la piedra preciosa llamada jacinto del peso de vna honça: que trayo en mis entrañas: por que si el supiera que yo trayo tal cosa: yo muriera en sus manos e el fuera muy rico. El rustico como oyo esto turbado en·si pesando le muy fuertemente por que avia dexado la auezilla: con grand dolor llorando dize assi. O»