«las quales todas renuncio e mudando su costumbre juro publica e solemnemente de no empescer: ni dapñjficar alguna bestia: o ganado: saluo tan solamente de comer su vianda sin sangre. E despues como no pudiesse mudar su costumbre le peso d·esto que hauia jurado: e assi començo de tomar e traher algunos en secreto por los engañar a los quales demandaua: si le olia mal la boca: e assi a·los que dezian»