«leuantado ningun temor me ponen nj a ti señor pongan que dexadas las ciudades fuertes que en mis reynos te haran espaldas, la grand traycion de aquellos sin poner en ellos las manos les dara la pena, o quan couardemente pelean los vasallos contra su señor ! que siempre el temor de·la suiecion vsada se espantara de·la furiosa espada de quyen señoreados fueron porque en la batalla se muestra mucho el vencimyento del culpado y como marauillosamente»