«vos? Y porque no diremos que vos la encimastes y vencistes de gloria? Ciertamente si las claras virtudes de·los principes victoriosos acreçientan los rayos de·la sangre real las vuestras entre las otras bien podemos dezir que los creçieron y asaz colmaron: quedo pues el infante illustre quedo encomendado por el rey su padre al desauido conde: conde desauido le llamo por que perdio tal joya que desposado y de secreto le tenia con su fija»