«algunos al rey don Jayme de Aragon por hauer tanto estropeçado en mugeres y no saben reconoscer y sentir los tales de quanto menor la tal culpa en vn rey y principe tan fermoso y dispuesto que su par en la cristiandad no le hauia: y tan amado por todos que damas y caualleros no se podian fartar de mirar le. Porque por los mas coronistas se escriue que allende d·el ser mas alto de cuerpo que ningun»