«que la ministrassen como buen herencio: cerco el mundo de su victoria: empero por nuestros tiempos aquel puerco nombre de Mahoma mucho la destraga. Esta destruccion y perdimiento de la cristiandad es padescida por la negligencia y mala cura de sus regidores: no es marauilla si el regidor de·la naue puesto en medio del el mar se adormiere que las tempestades de·la fortuna perder le puedan. Si el capitan siquier guarda de vna ciudad»