«diuersas que para mi companyia en el caso se legaron pareçia con sus vozes que los muertos recordauan de su siglo: y tanto quanto con los oios la llorauan tanto con sus bocas a Pamphilo maldezian: de manera que dama tan planyida ni hombre tan desonestado no se halla en memoria: porque solo las senyoras y damas de aquella tierra asi natural la hallaron para sentir su manzilla: que ni las hijas de Priamo lloraron tanto por»