«guarda de escopir e de tocar en las narizes, e deues disponer la tu lengua que non sea muncho descubierta de·los labrios, e que non sea cargada de saliua, e que non faga muncho espaçio de tienpo de vna palabra a otra, nin mucho apriesa tanpoco, e sobre todo guarda de redoblar las palabras. Deues consonar tu boz, por tanto como son palabras que se quieren dezir fuerte, e otras por media»