«los quatro braços determinado que si defendedor la enperadriz no fallaua que defendiesse como cauallero su causa que mereçia ser publicamente puesta en foguera: mando entonce el enperador que lo fiziessen saber a·la reyna para que buscasse quien la defendiesse: espantada la reyna de tan cruda sentencia mando embiar a Castilla a requerir sus altos parientes que viniessen a la defender: no se fallaua pariente ni deudo ni criado ninguno que contra los fijos del emperador osasse»