«biuas e plazenteras de ver verduras afalagando la vista. E de la otra parte trae en·la boca el peligroso escondido venino de viçios e penalidades que procura. A·los que se reposan. O confian en·los sus deleytes. El omne virtuoso comete afogar esta sierpe tan engañosa. Por menospreçio del mundo e cognosçimiento de su miseria. Estonçes el mundo veyendo que so tal habito e figura serpentina non podria el virtuoso proposito derribar que»