«el Ciçeron como en son de quexoso ) dio vozes y dixo. O mas venturoso que valiente mançebo: que tal pregonero para tus fechos fallaste. Como quien dize: o quan grande fue tu dicha: y quan desdichada mi suerte houo sido que por culpa del tiempo dexe de alcançar vn tan rico pregonero: como el tuyo fue. El segundo se dolia mas quexaua reziamente: por que tan pocos d·el escriuian: tanto»