«non oluidar aquella que nunca te oluida. E non quieras menospreciar la grand constancia et lealtad de tus originales reynos et fieles uasallos que continuamente ruegan et fasen oracion por tu prospera uida deseando tu uenida et non con menos deseo que los arboles despoiados et fatigados del tempestuoso et trabaioso inuierno esperan la plasiente primauera que los cubra et uista de nueuas et uerdes foias et los orne de preciosas et odoriferas flores. Ansy tus naturales esperan lançar»