«que el mundo no las consiente nj el çiello las reçibe. Mas la donzella demudada y triste ansi respondio. Mejor lo agua Dios senyora del que vos sinnifjcays ni dezis: ny que Fortuna permjtiese que con tanta disfauor desesperase de mj deseada sperança. § La madrjna que con jesto muy turbio vido la donzella star: penso que de su mala contentaçion no fuese otra causa sino amor y temor. Temor que por el tiempo por venjr»