«sus tiempos scarnesciendo se de mi: y como ya pues en los poblados no pueda la tal senyora hallar he acordado que segund yo perdido y ella no menos andamos que las siluas y los campos y lugares y enuegecidos desiertos son conformes a los muy desesperados coraçones: y pienso que alguna persona desesperada assi como yo quiça por·aqui passara que de sus nueuas me diga: ho sera tal ventura la mia que ella su Pamphilo buscando»