«de tus manos tan sin mesura cada dia mas contra nossotros obradas, han hecho a los vasallos señoreantes del señor, porque la nuestra paciencia y virtut puesto que largos tiempos aya durado la sobra de tus males nos hizo despertar del suenyo de tan pasciente simpleza, ya no parescia sufrir·la tan magnjfica caualleria por humildat y virtut, mas por couarde subiecion y mas a mengua de coraçon que a costante lealdad se nos atribuya, y»