«manos de nuestro padre Siluestre a sus cuerpos sagrados porque la sede pontifical no se abaxe con la pobreza mas que resplandezca en dignidad y mucha gloria: por·ende mouidos con affection damos a Siluestre y a·los successores que despues vinieren la ciudad romana con nuestros palacios toda Ytalia con las prouincias de ocidente regiones ciudades yslas y lugares dende cercanas en Christo Jesu nuestro señor. Nos el imperio nuestro mudamos en oriente a·la ciudad Bizantia: esta»