«y trata desde ahi con el rey que le de al gran senescal que sin el viuir no podia y que le dara por el solo a mossen Bernad Çentellas y a don Ramon de Perellos. El rey es contento y el destroque se faze: despierta·se otro partido para el seruicio del magnanimo rey: que el alcayde de·la ysla de Iscla que es muy fuerte y mucho cumplidera para mayor seguridad del estado del rey offreçe de entregar»