«no peleassen: y a·la muerte por su dios no se ofreciessen: y por esta parte pocos d·ellos dexaria de contar por sanctos: sino que por breue ser passo tan apriessa por ellos. Mas que me detengo en memorar los passados? No tenemos al serenissimo rey don Fernando el presente: que tantas vezes puso la vida por Dios: que ya pudiera ganado hauer cient coronas de martyr famoso? Mas de·los magnanimos»