«postre dos caualleros françeses: y de que vido que las armas le fallecian deslazo·se el yelmo y con aquel arremetio para el primero: y tan gran golpe le dio con·el por las quexadas que le derribo los dientes de·la boca: y dio con·el la escala abaxo: y aquel derribado derribo al otro que venia empos d·el: y los dos tomaron tan graue cayda que juntos llegaron muertos a tierra: el»