«el señor mouido contra el perro: dixo le. Para que eras bueno ya non vales nada. Al qual se recuenta que respondio el perro. Señor yo he ya muchos años e soy sin fuerça e sin buenos dientes: en algund tienpo fuy fuerte e entonces me alabauas por lo que fuy: e agora me reprehendes por lo que non puedo: acuerda te de·lo que fize e como oy en dia fago lo que»