«las ajenas. Y quando por muchos fue reprehendido respondio que Dios le otorgaua este preuilegio para el solo por que muchos nuncios y fijos de virtud engendrar pudiesse para le seruir: fue tentacion de vna bestia impudentissima referir a Dios tan triste vicio segun que parece por su Alkorano. Y el permisso que les otorga para mercar sieruas y tener captiuas es todo caso adulterino muy manifiesto: por que muchas vezes el padre merco la sierua stuprada»