«que njño era aquel: la muger dize: mio es. El marabillante se d·esto dixo: e donde vino este njño yo seyendo absente. Afirma la muger muy osadamente que la mesma gracia e misericordia de Dios ge·lo avia dado. Entonces dixo el maestro de naue con gran saña: como la gracia de Dios entiende en procrear e fazer en mi muger fijos: por esta gracia muy poco le agradesco: porque»