«publicara su valentia excellente empero: valio le mucho mas su tan subida virtud: ayudo le nuestro Señor que en su corte le recibio le corono engrandeçio: y de corona de marauilloso martyrio para siempre le arreo: do reynara perennalmente y sin fin. Acaheçio esta desygual desauentura en·el año de ochocientos y treynta y cinco. Escriuen otros quarenta y dos: y lo peor que de ella siguio que no quedo successor en·el»