«no eres, ninguno no esta aqui de·los que te son contrarios que sin desaventura o muerte no sea por sola tu causa. Y di Amor quyen sino tu fue ocasion del destruymyento de·la magnifica casa de Troya donde tan grandes reyes y otros grandes señores y gentes perdieron las vidas, y con las tus llamas forçaste a Paris para qu·el a Helena forçasse robando·la y en estranyos reynos a la qual injuria restituyr el»