«mas luego essa noche se partio de secreto. El otro dia mañana como el emperador le quisiesse festejar mucho mas en sabiendo que se era ydo recibio gran enojo: y ya mucho mas de que supo por la emperadriz que a ella sola se hauia descubierto: como el cauallero que la hauia defendido era el buen conde de Barcelona. No supo como remediar·se el emperador don Enrique quando tan vencido se fallo por la tan»