«les puso de·la cierta poderosa y tan presta venida del rey que toda la ciudad se alegro. Y todos perdieron el miedo: y cobraron tan gran coraçon que fue marauilla: por la contra los enemigos todos se encogieron y començaron a desfiuzar: todos se espauorecieron de spanto y temor sobrado de valedor tan poderoso magnanimo y tan real. En llegando el capitan del rey luego la reyna mando dar el publico pregon por la ciudad»