«los cielos de amor tenian. Y a esto ellos quexosos respondian que no eran sus aposentamyentos cielos de amor mas jnfierno de pena, y en quanto aqua viuieron cada vno contaua mas su mala que buena vida, por ende en este mundo nj en aquel no hallauan dia de que se lohasen saluo d·este en que agora estauan en tanta paç y amjgable ermandad ver·se vnos con otros marauillando·se los biuos de·los muertos,»