«el cuytado del asno espantado de·la soberuia del cauallo: callando entre·si gemiendo se quexa de·los dioses. Despues antes de mucho tiempo el cauallo corriendo rebento: de manera que se non pudo reparar: e assi enflaquescio que non pertenescia a su señor: por lo qual mando que lo leuassen a su heredad para leuar e carrear estiercol para las tierras e viñas: por que el cauallo dexados los arreos plateados e dorados uvo»