«que no perdiessen coraçon ni los espantasse la pujança del cruel tyrano que el seria luego con ellos: y le presentaria la cruda batalla que ya le tenia conoscido: ya sabia que no le osaria esperar: mucho se esforçaron los valencianos con la carta del valiente rey: alegraron se de tener principe tan magnanimo que ni dexaria de·los socorrer ni de poner su persona en peligro y en qualquier afruenta de muerte por valer a sus»