«ahun que mis conseios sean enemigos de tus desseos despues que a tu sentido tornes loharas lo que agora auorreçes: y me seras en cargo porque tanto sobre tus honores he prouehido. Piensa pues sin duda segund tu gran estado yo no·menos que tu querria plazeres nueuos: y dar companyia a·los passados deportes: pero mas quiero sentir pena sforçando me contra las llamas de amor: porque aquellas abrazadoras la vida y estado assuelan:»