«siguio por desdicha que antes de boluer los embaxadores a Catalueña el magnanimo rey don Alfonso con sobrado gozo y contentacion del tanto beneficio que de·la paz se esperaua mando fazer alegrias por toda la ciudad: y por mas fauorecer y acompañar la fiesta mando caualgar todos los principales caualleros y hombres de honor que ahi se fallauan: y el mismo subio en vn cauallo muy fermoso y especial que le hauian traydo de Siçilia: y anduuo»