«para lo matar. Ca eran çiertos que ella mucho en esto sabia. Pues moraua en·los montes e andaua cada dia por aquellos apartados lugares e podia ver e veya saber e sabia los lugares e maneras de·las fieras otras e del dicho puerco e de·las cosas que fazia. Assy andouieron en vno con·la virgen Atalante que los guiaua los nobles mançebos de Calidonia a·las asperas montañas do mas vsaua el esquiuo puerco .»