«a Xanthus: señor ruego te que pues quieres quemar a tu muger: me esperes vn poco mientra que yo trayo la mia: para que amas juntamente sean quemadas. Lo qual oyendo Xanthus e marabillando se dixo: firme es el coraçon d·este ombre: e es sin cuydado: e buelto a Ysopo dixo: cata que me has vencido: mas non sea de aqui adelante d·esta manera: si fielmente e con diligencia»