«de plomo que tienen propiadat d·aborreçer y en·la otra de oro de·azer amar, con alas de diuersas colores: que demuestran los humanos seguir y desear jnfinjtos apetitos. E en·la mano drecha vna de·las flechas d·oro: que con·la potençia diujna tiene tan çierto el ferir que jamas yerra en aquel lugar que llaguar qujsiere. En·la prinçipal puerta d·aquesta abitaçion continuamente salen llamas de viuo fuego: en lo»