«assi que llegamos en aquel dia en vn desierto donde nunca hombre ni fijo suyo hizo morada ni habito porque no hauian seluas ni montes con arboledas empero si spanto y sombra de muerte lleno de barrancos y sequedad del huego del sol. Muchas vezes vimos por aquel desierto vna espessura como de fumo la qual parecia salir de huego empero despues por esperiencia clara parecio ser vn mouimiento y rebolucion de·las arenas menudas y poluos puestos en·»