«en demasia por Dios amado principe: por quien fasta los cielos vemos que pelean y juntos concordes los vientos fazen como a sonadas y se arman por le valer: este es aquel tan venturoso y cristianissimo emperador que a fuerça de viua fe de ruegos y deuocion vencio sin gente quasi al soberuio y poderoso tirano Maximo enperador en los Alpes de Alemaña: y le truxo ante sus pies. Que diremos pues de Archadio y de Honorio»