«poder de los enemigos nuestros: porque seyendo ellos alcaldes y parte conocida staua la sentencia que agora oymos. O malditas mujeres porque con tantos affanes de partos y fatigas quereys aquellos que en muertes y menguas vos dan el gualardon. O si conseio tomassedes en el nacimiento del hijo dariades fin a·sus dias: porque non quedassen soietas a·sus enemigos y alegre vida viuiessen. Mas que aprouechan mis palabras quando nos mismas criamos aquellos que»