«muy esforçados. Estos infieles derramadores de christiana sangre no fueron ahun del todo contentos en·los grandes daños que fecho hauian en·la christiandad: empero queriendo vengar las injurias que se les hizo por el esfuerço de tan noble gente luego aparejaron de grandes armadas contra la Ytalia touiendo por cierto que la traerian debaxo el jugo de su maldita y puerca secta. No fue marauilla de su empresa que vn tyranno tan poderoso hallando se rico y»